La agresión de una joven influencer reaviva el debate sobre el sistema de justicia para menores.
Tras ser arrestada por un presunto ataque con arma blanca, la creadora de contenido Marianne “N” fue vinculada a proceso por el delito de lesiones dolosas.
La audiencia judicial tuvo lugar el 11 de febrero a las 11:00 horas en los juzgados especializados para adolescentes en la Ciudad de México, extendiéndose por más de cinco horas. Durante la sesión, un juez especializado dictaminó internamiento preventivo para la acusada, quien con 17 años enfrenta consecuencias legales tras haber agredido a Valentina Gilabert el pasado 5 de febrero en Park Pedregal, un conjunto residencial ubicado en la alcaldía Álvaro Obregón.
Testimonios de familiares de la víctima indican que la joven fue apuñalada entre 13 y 14 veces, lo que provocó graves lesiones en órganos vitales y en sus manos. Debido a la gravedad de las heridas, fue trasladada de emergencia a un hospital, donde permanece en estado crítico.
El proceso penal de Marianne “N” contempla un plazo de dos meses para la fase inicial de investigación. Mientras tanto, la imputada permanecerá en prisión preventiva dentro de un Centro Especializado para Mujeres y Adolescentes, donde esperará el inicio de su juicio.
Los abogados de la joven han declarado que ella se encuentra arrepentida por lo sucedido, aunque su familia ha optado por no emitir declaraciones públicas. En contraste, los representantes legales de Valentina Gilabert han expresado su satisfacción con el trabajo realizado por la Fiscalía capitalina en la conducción del caso.
El hecho ha generado un intenso debate en redes sociales sobre las implicaciones legales para menores de edad en casos de violencia. Mientras que Marianne “N” podría recibir una pena máxima de cinco años de cárcel, casos como el de Rodolfo “Fofo” Márquez, quien a los 27 años fue condenado a 17 años de prisión por feminicidio en grado de tentativa, han suscitado comparaciones y cuestionamientos sobre la equidad del sistema judicial.
