El gobierno mexicano ha anunciado la intención de revisar y actualizar el Entendimiento Bicentenario, el acuerdo de seguridad que se firmó en 2021 entre México y Estados Unidos. Esta información fue revelada por Ricardo Trevilla Trejo, secretario de la Defensa Nacional, durante una conferencia de prensa celebrada en Palacio Nacional.
Trevilla Trejo indicó que, siguiendo instrucciones de la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, es fundamental llevar a cabo una revisión de este acuerdo. La meta es asegurar la continuidad, actualización y fortalecimiento de las acciones emprendidas para abordar el problema del tráfico ilegal de armas que provienen de Estados Unidos hacia México.
En la misma conferencia, la presidenta Sheinbaum comentó que las demandas contra fabricantes y vendedores de armas en Estados Unidos, iniciadas durante el mandato de su predecesor Andrés Manuel López Obrador, siguen su curso en los tribunales estadounidenses. La mandataria enfatizó que su administración se compromete a continuar con estos procesos legales.
El secretario de la Defensa subrayó que, bajo el gobierno de López Obrador, se llevaron a cabo significativos esfuerzos para hacer que Estados Unidos reconozca que una parte considerable de la violencia que enfrenta México es consecuencia del armamento que ingresa desde su territorio.
Por primera vez en un acuerdo bilateral, el Entendimiento Bicentenario incluye el compromiso de abordar conjuntamente el tráfico ilícito de armas hacia México, lo que representa un paso importante en la colaboración entre ambos países. Trevilla Trejo añadió que se ha hecho hincapié en la necesidad de que Estados Unidos implemente acciones efectivas para mitigar este problema.
Además, al ser cuestionada sobre las elecciones presidenciales en Estados Unidos, la presidenta Sheinbaum afirmó que México trabajará con el futuro ganador de los comicios, dejando claro que no tomará partido por ningún candidato en particular, ya sea la demócrata Kamala Harris o el republicano Donald Trump. La administración actual busca mantener una postura neutral en el proceso electoral del país vecino, reafirmando su compromiso de cooperación sin inclinaciones políticas.
