La crisis migratoria ha ocupado gran parte de la agenda bilateral entre México y Estados Unidos, y es que el incremento sustancial de ilegales que todos los días intenta conquistar el “sueño americano” al cruzar hacia los Estado Unidos desde México, es para ambas naciones una problemática que exacerba los ya de por sí problemáticos puntos de tránsito en la franja fronteriza común, temas que van desde la crisis humanitaria, hasta los temas de seguridad.
Es por ello que este fue el tema central que intercambió opciones entre ambas naciones a través de sus representantes en la reciente visita que la delegación mexicana realizó con la canciller Alicia Barcena a la capital norteamericana.
En lo que parece ser un eco de esa reunión, ahora el primer mandatario mexicano Andrés Manuel López Obrador confirmó que recibirá una delegación de representantes del poder legislativo texano, un estado norteamericano con el que México ha sostenido permanentes desencuentros en materia migratoria.
Al respecto López Obrador anunció que se prepara para recibir en reunión privada a los congresistas de Texas, Michael McCaul y Randy Weber, quienes visitan México con motivo de la crisis migratoria que se vive.
“Apenas me acaban de informar y es probable que sea martes la reunión, son congresistas de Estados Unidos, de Texas”, señaló el presidente quien dejó de manifiesto su interés de seguir abordando el tema con los representantes norteamericanos, quienes se han dividido en dos bandos; quienes pugnan por medidas de apoyo a la clase migrante, facilidad y programas de atención humanitaria, y quienes pugnan por medidas cada vez más restrictivas que rayan en el atropello de los derechos fundamentales.
Si bien López Obrador no dió más detalles, sí se mostró complacido con el encuentro “Qué bueno que voy a poder hablar con ellos, porque son como nuestros paisanos, nos vamos a entender bien” sentenció.
