“Ismail Haniyeh, líder del buró político del movimiento Hamás, realizó una llamada con el primer ministro catarí, Mohammed bin Abdulrahman Al Thani, y con el ministro de Inteligencia egipcio, Abás Kamel, y les informó de la aprobación por parte del movimiento Hamás de su propuesta sobre un acuerdo de alto al fuego“, dijo en un comunicado esta mañana el grupo palestino paramilitar que se declara yihadista, nacionalista e islamista enfrentado con el estado de Israel en una cruenta guerra que ya se ha cobrado más de 10 mil muertes.
Cuestionado al respecto, un portavoz del Ejército de Israel afirmó que se encuentran examinando seriamente cada respuesta y estamos agotando todas las posibilidades con respecto a las negociaciones y la devolución de rehenes.
Sin embargo la información aún no ha sido oficializada, pero de acuerdo a los medios locales, la postura es en realidad unilateral del lado de Hamás y no cuenta con la luz verde de Israel.
Fuentes internas desde Israel apuntan a una “estrategia para desprestigiar a las fuerzas de Israel” que podría quedar como la parte que “no respeta acuerdos de paz”, por lo que está trascendería en realidad como una “fake news” otra de las caras de la guerra.
A la espera de más información, los entes internacionales esperan que la tregua sea una realidad que permita un proceso de pacificación en beneficio de los civiles afectados y desplazados, ya que sería la primera tregua desde una pausa de una semana que tuvo lugar a finales de 2023 y cuyos intentos fallidos se han extendido por meses, lo que mantiene los bombardeos sobre gaza, rehenes en manos de Hamás que Israél intenta rescatar y ayuda humanitaria que no puede entrar a ciertas regiones de Gaza donde la hambruna es ya una realidad.
