El estado norteamericano de Florida se sumó a la estrategia de contención migratoria realizada por Texas en su frontera con México, y es que la reciente semana se han incrementado de manera sustancial la cantidad de ilegales que intentan conquistar el “American Dream”.
El controvertido gobernador floridiano, Ron DeSantis, volvió a echar mano de su discurso racista y en medio de una permanente consigna contra los migrantes en Estados Unidos, anunció, que cuenta con un plan que incluye a 1,100 elementos entre Guardia Nacional y agentes policiales, los cuales serán enviados Texas para colaborar en tareas de seguridad fronteriza.