La justicia colombiana marcó un precedente histórico al condenar este viernes al expresidente Álvaro Uribe Vélez a 12 años de prisión por los delitos de fraude procesal y soborno en actuación penal. La decisión, emitida por la jueza Sandra Liliana Heredia, titular del Juzgado 44 con función de conocimiento de Bogotá, establece además su detención domiciliaria y una multa de 578 mil dólares.
Uribe, quien gobernó Colombia entre 2002 y 2010, se convierte así en el primer exmandatario del país en recibir una sentencia condenatoria. El caso está relacionado con un proceso de manipulación de testigos en el que se investigó si el expresidente habría intentado alterar declaraciones para favorecer su situación judicial.
En su fallo, la jueza Heredia absolvió a Uribe del cargo de soborno, pero mantuvo la condena por fraude procesal y soborno en actuación penal, señalando que existieron maniobras ilegales para incidir en testimonios durante un proceso penal. Además de la pena de prisión y la multa económica, la sentencia contempla la inhabilitación para ejercer derechos y funciones públicas durante el tiempo de la condena.
El proceso judicial contra Uribe ha sido uno de los más seguidos en Colombia, dado el peso político del exmandatario y su influencia en la vida pública del país. Abogados vinculados al caso confirmaron la sentencia a la agencia Reuters, lo que ha generado un intenso debate nacional sobre la lucha contra la corrupción y la responsabilidad de altos funcionarios.
Se espera que la defensa de Uribe interponga recursos legales para apelar el fallo, buscando revertir la condena. Mientras tanto, la decisión judicial representa un hecho sin precedentes en la historia política y judicial de Colombia.

