Un grupo de 19 mujeres afganas, a quienes los talibanes les negaron el derecho a estudiar medicina, logró escapar de Afganistán y llegar a Escocia con el apoyo de la Fundación Linda Norgrove. Esta organización, creada por los padres de una voluntaria británica secuestrada y asesinada por los talibanes en 2010, trabajó durante tres años con las autoridades del Reino Unido y Escocia para asegurar la seguridad y el futuro académico de las estudiantes. Las jóvenes recibirán educación médica gratuita en cuatro instituciones médicas de Escocia, tras haber soportado mil días de confinamiento y miedo en Afganistán. Omulbanin Sultani, de 21 años, expresó su alivio y esperanza al llegar a Edimburgo, describiendo el cambio como «pasar del infierno al paraíso».


