En un hecho sin precedentes, más de 600 comunidades indígenas y afromexicanas del Estado de México recibirán recursos económicos directos, sin intermediarios, para invertirlos en proyectos de desarrollo definidos por ellos mismos. Así lo anunció la Gobernadora Delfina Gómez Álvarez, durante un evento realizado en el Centro Ceremonial Otomí, ante la presencia de miles de integrantes de los pueblos originarios mexiquenses.
La entrega se realiza a través del Fondo de Aportaciones para la Infraestructura Social de los Pueblos Indígenas y Afromexicanos (FAISPIAM), con el objetivo de reducir la brecha de marginación en comunidades nahuas, matlatzincas, mazahuas, tlahuicas y otomíes. Este esquema promueve la autonomía de las comunidades al permitir que los propios beneficiarios, mediante asambleas, definan en qué obras, servicios o acciones sociales invertirán el recurso recibido.
“Hoy es un día histórico. Con este modelo sin intermediarios, las decisiones las toman ustedes. Este es un verdadero acto de justicia para los pueblos originarios del Estado de México”, expresó la Gobernadora Delfina Gómez.
Se instalarán Comités de Control y Vigilancia para asegurar la transparencia y el uso adecuado de los recursos, y serán mujeres de las propias comunidades quienes funjan como tesoreras en cada proyecto.
Este esfuerzo responde a la visión de justicia social impulsada por el Presidente Andrés Manuel López Obrador y fortalecida por la administración federal encabezada por la Presidenta Claudia Sheinbaum Pardo. La iniciativa busca empoderar a los pueblos originarios y afromexicanos como sujetos de derecho, permitiéndoles ejercer su autonomía con recursos públicos.

