El presidente municipal Nicolás Martínez Romero presentó su informe de los primeros cien días de gobierno, destacando un modelo de gestión basado en transparencia, eficiencia presupuestal y atención directa a las comunidades.
Durante el acto, al que asistieron ciudadanos, líderes comunitarios y representantes de distintas fuerzas políticas, se expusieron 3,882 acciones ejecutadas bajo un enfoque de cero tolerancia a la corrupción y prioridad en obras de impacto social.
Entre los avances mencionados, resaltó el saneamiento de las finanzas municipales sin recurrir a aumentos en impuestos, además de la remoción de funcionarios involucrados en irregularidades. Este nuevo esquema de gestión ha permitido redirigir recursos hacia servicios básicos como agua potable, alumbrado y recolección de residuos.
En colaboración con instituciones educativas, se firmaron 25 convenios para garantizar el acceso al agua en planteles. También se llevaron a cabo jornadas de esterilización animal y se mejoraron las rutas de basura, generando ahorros sustanciales.
Uno de los logros más destacados fue el reinicio de obras en la carretera Atlacomulco-Santiago Acutzilapan, que llevaba dos décadas abandonada, beneficiando a familias de comunidades rurales. Se agregaron además campañas de bacheo intensivo y nuevos pozos de agua en zonas con alta demanda.
En el rubro social, se implementaron caravanas médicas con detecciones oportunas, vacunaciones y talleres de salud mental. Eventos comunitarios como el Carnaval Municipal lograron reunir a más de 20 mil personas, y actualmente se remodelan espacios deportivos para fortalecer el tejido social.
Martínez Romero destacó la disminución de delitos de alto impacto y reconoció que aún existen retos. “Este gobierno trabaja con resultados visibles; seguiremos construyendo un Atlacomulco más humano y seguro”, afirmó.





