La organización del Mundial 2026 en Estados Unidos continúa generando atención internacional luego de que Andrew Giuliani, jefe del grupo de trabajo de la Casa Blanca para la justa deportiva, señalara que el gobierno del presidente Donald Trump no descarta aplicar operativos vinculados al control migratorio durante el torneo. Las declaraciones fueron emitidas en Washington, previo al sorteo de grupos que se realizará este viernes, y se centraron en el papel que jugará la seguridad nacional durante la competencia que compartirán Canadá, México y Estados Unidos.
Giuliani enfatizó que el presidente considerará cualquier medida que fortalezca la protección interna, mencionando que garantizar un entorno seguro será una prioridad para el país anfitrión. Afirmó que no se permitirá la presencia de personas que representen riesgos o que generen desórdenes durante el evento, y agregó que la intención del Ejecutivo es demostrar que la seguridad puede integrarse con la hospitalidad hacia los visitantes internacionales.
La justa deportiva se celebrará entre el 11 de junio y el 19 de julio de 2026, en un contexto marcado por políticas migratorias estrictas que han sido objeto de debate desde el inicio del mandato de Trump. Consultado sobre la posibilidad de que se nieguen visados a turistas que deseen asistir al torneo, Giuliani aclaró que cada autorización será evaluada como una decisión relacionada con la seguridad nacional, reforzando la idea de que no habrá excepciones fuera del marco establecido por el Departamento de Estado.

El funcionario también recordó que quienes posean boletos para los partidos podrán solicitar una cita con autoridades migratorias con el fin de iniciar procesos de visado. Destacó, además, que se han reducido los tiempos de espera en países como Argentina, Ecuador y Brasil, estableciendo periodos menores a dos meses. También puntualizó que naciones europeas y Japón se mantienen dentro del programa de exención de visas.
Respecto a países incluidos en la lista de naciones con restricciones de ingreso, como Irán y Haití, Giuliani confirmó que parte de sus delegaciones han recibido permisos especiales para ingresar al territorio estadounidense. En cuanto a los aficionados de ambas naciones que buscan viajar como espectadores, señaló que las decisiones recaerán directamente en el Departamento de Estado, responsable del otorgamiento de visados y de la evaluación final de cada caso.


