Surgieron rumores en las redes sociales alegando que Khelif había obtenido una ventaja injusta al ser una “mujer trans” con “hormonas masculinas”.
Estas afirmaciones son falsas. No hay evidencia de que Khelif sea transexual. La desinformación se originó después de que la Asociación Internacional de Boxeo (IBA) descalificara a Khelif en 2023 debido a supuestos niveles altos de testosterona. El Comité Olímpico Internacional aclaró que Khelif cumple con todas las normas de elegibilidad y que “toda persona tiene derecho a practicar el deporte sin discriminación”.
Khelif es una mujer cisgénero, lo que significa que su identidad de género coincide con el sexo que se le asignó al nacer. Sin embargo, ha sido objeto de muchas especulaciones sobre su identidad de género. Su caso ha reavivado el debate sobre la participación de mujeres con diferencias de desarrollo sexual (DSD) en competiciones femeninas.
Existen varios tipos de DSD, que son condiciones raras que involucran genes, hormonas y órganos reproductores. Algunas personas con DSD son criadas como mujeres, pero tienen cromosomas sexuales XY.
Además, en Argelia, la comunidad LGBT+ no tiene reconocimiento legal, y las personas trans no pueden competir en boxeo a nivel profesional ni en los Juegos Olímpicos. Khelif ha compartido que ha sufrido bullying debido a su apariencia y que padece hiperandrogenismo, una condición que provoca niveles elevados de testosterona de manera natural.


