La creación del Tren Maya ha favorecido a varios empresarios y a pesar de que el Gobierno Federal favorece el proyecto sobre la protección del Gran Acuífero Maya, que es la única fuente de agua potable de la región, la ambientalista Cristina Nolasco decidió recopilar los datos que ha provocado la construcción de dicho medio de transporte a la flora y fauna de la zona.
Hasta el momento más de 121 cuevas y cenotes han sido afectados, la construcción del tren ha provocado la tala de más de 10 millones de árboles en medio de la selva virgen, ya que dicha cubierta vegetal provoca cambios en la temperatura de las cuevas y los cenotes donde el nivel del agua desciende, de igual manera la ambientalista mencionó que “Se fragmentó uno de los corredores biológicos más grandes donde viven jaguares, ocelotes, todo tipo de mamíferos, en 8 meses, 6 jaguares fueron atropellados al estar atrapados entre el tren y la carretera” se está invadiendo su hogar, teniendo en cuenta que dichos animales están en peligro de extinción. Por lo cual ambientalistas han pedido al gobierno respetar la flora y la fauna de la región y ya no realizar más obras de infraestructura porque solo se está pensando en la economía y no en la preservación del medio ambiente que tiene repercusiones en la región.
