Después de asesinato de Antonio Monroy, de 59 años de edad, el pasado domingo 8 de enero de este año en el restaurante La Polar, de la colonia San Rafael, en la alcaldía Cuauhtémoc, por una fuerte golpiza propinada por los mismos trabajadores del restaurante su acompañante, Adriana, denuncio que fue golpeado por los meseros, y en las primeras declaraciones, se debía a que se habría negado a pagar la cantidad de propina que le exigieron los meseros, pero después se aclaró que además de la “propina” que superaba más del 50 % más del consumo total de propina, el servicio que les ofrecieron había sido horrible agregando maltrato, donde la pelea entre el hombre fallecido y los meseros no se hizo esperar, afortunadamente tras este incidente el lugar fue clausurado y se detuvieron a tres presuntos trabajadores involucrados.
Pero la tarde de ayer se dio a conocer a través de redes sociales que este restaurante “problemático” habría vuelto a abrir sus puertas, festejando su reapertura con mariachis, por desgracia para ellos el gusto no duró más de tres horas, ya que después las autoridades del Instituto de Verificación Administrativa (INVEA) – quienes esa tarde retiraron los sellos de clausura- volvieron a colocar nuevos sellos de suspensión de actividades, esto debido a que los encargados no contaban con los documentos que avalara que el restaurante tenía permitido volver a operar por parte de los encargados, ante esto familiares de los trabajadores de La Polar bloquearan el Circuito Interior esquina Guillermo Prieto exigiendo volver a trabajar, aunque minutos después fue reabierta la circulación, después de que un operativo policial encapsulo a los manifestantes que cerraron el circuito de la vía en la colonia San Rafael y el personal del Invea donde también hubo presente personal de la Dirección General Jurídica y Asuntos Legales de la alcaldía, colocaron los nuevos sellos.
