La medidas de apremio propuestas dentro de la reforma al Poder Judicial de la Federación se han convertido en un punto de desencuentro entre los mismo partidos, particularmente un segmento de los diputados de Morena que se han dividido en opiniones y uno grupo de ellos ha impedido que esta reforma tome el curso que esta semana se había anunciado como confirmado.
Así, se pospone otra vez la discusión de esta tan anunciada reforma, y se ha hecho en virtud del desacuerdo mostrado por algunos legisladores que dicen, requieren más tiempo para ponderar cada uno de los apartados propuestos en la iniciativa.
Legisladores como Salma Luévano Luna ya catalogan esta reforma como “regresiva” y han dicho que van en contra de ella “No a una reforma regresiva, sí a las acciones afirmativas y además, además, faltan aún más espacios para nuestras poblaciones” sentenció.
