El destape de cara a la sucesión presidencial en los Estados Unidos, ha despertado el clamor popular dentro del segmento opositor que no considera al actual gobernador de Florida Ron DeSantis, un perfil adecuado para los intereses de la nación americana.
El militante republicano hizo ayer su formal aspiración a contender por la Casa Blanca, y la respuesta ha sido tan variada como polémica, ya que a DeSantis se le considera un político de abierta lucha contra la “agenda Woke” o progresista en Estados Unidos, así que las opiniones van desde la recomendación a que una fuerzas con Trump, hasta la manifestación pública de hoy en las calles de Florida, donde tachan al actual gobernante de racista y fascista.
Ron DeSantis promotor de la controvertida ley “Dont Say Gay” que limita las discusiones sobre orientación sexual en las escuelas primarias, ha escrito, entre otros, el libro The Courage to Be Free, edición donde publicó el “manual para el político” donde establece que a su consideración todo político debe de estar dispuesto a liderar con el coraje de sus convicciones, para lo cual debe de estar listo para cumplir con sus electores “y cosechar las recompensas políticas”.