La controvertida estrategia contra la delincuencia en El Salvador, establecida por su presidente Nayib Bukele, sigue su curso. Una permanente persecución y detención a los pandilleros ha dado como resultado una sobrepoblación de los centros penitenciarios, por lo cual fue necesaria la inauguración de una “mega cárcel”.
A esta nueva prisión fueron trasladados ya los primeros internos, dos mil pandilleros de la Mara Salvatrucha, para lo cual fue dispuesto un robusto operativo que incluyó vehículos blindados y helicópteros.
“…trasladamos a los primeros 2 mil pandilleros al Centro de Confinamiento del Terrorismo (Cecot). Esta será su nueva casa, donde vivirán por décadas, mezclados, sin poder hacerle más daño a la población”, dijo el presidente Nayib Bukele.
.