En medio de la que ha sido denominada como “la peor crisis migratoria en el continente”, el presidente norteamericano Joe Biden afirmó que su plan de contención migratoria tiene mucho que ver con México y el gobierno de López Obrador.
Biden aseguró este jueves que su administración accedió a conceder 30 mil permisos humanitarios mensuales para migrantes de Venezuela, Haití, Nicaragua y Cuba, siempre y cuando México asumiera el compromiso de admitir a igual número de indocumentados.
Sin declaraciones de primer momento por parte del gobierno mexicano, esta afirmación del país del norte se convierte en un elemento de juicio adicional, para los grupos opositores que aseguran que México se está convirtiendo en “tercer país seguro” sobre el que recaería la responsabilidad de todos aquellos migrantes que no logren asilo en los Estados Unidos.