José Ramón Cossío, ministro en retiro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), expresó su preocupación ante la reforma judicial que propone la elección de jueces mediante voto popular. Según Cossío, esta medida expondrá a los jueces a una situación de peligro, ya que podrían terminar respondiendo a los intereses de quienes financien sus campañas electorales, como narcotraficantes, delincuentes y otros actores que operan en contra del Estado.
Durante la presentación del reporte “Cuando impartir justicia es peligroso”, Cossío argumentó que esta reforma podría provocar que los jueces se vean obligados a actuar no en beneficio de la ley, sino de aquellos que financien su ascenso al poder. Esto generaría un ciclo de violencia en contra de los jueces cuando no puedan cumplir con los deseos de sus patrocinadores.
Cossío también criticó la idea de implementar jueces sin rostro, una medida que comparó con las políticas autoritarias adoptadas por el expresidente de Perú, Alberto Fujimori, y su exdirector de inteligencia, Vladimiro Montesinos. Para Cossío, esta propuesta refleja una peligrosa tendencia hacia la creación de un sistema judicial controlado por intereses privados y delictivos.
Por su parte, Mariana Campos, directora general de México Evalúa, señaló que la creación de un Tribunal de Disciplina en sustitución del Consejo de la Judicatura Federal (CJF) no resolverá los problemas actuales del sistema judicial. En su opinión, este nuevo tribunal facilitaría la presión sobre los jueces, en lugar de asegurar que actúen conforme a derecho.
Cossío concluyó que estas reformas representan una amenaza para la integridad del sistema judicial mexicano, generando una espiral de violencia y corrupción en los próximos años.