En una rueda de prensa, el titular de la Organización Mundial de la Salud (OMS) Tedros Adhanom Ghebreyesus, emitió una alerta global para que no se pierda de vista la crítica condición que los civiles en la región de la Franja de Gaza están enfrentando, los que están a punto de entrar en una situación declarada de hambruna.
Aseguró que tras el análisis de los datos generales que actualmente se tiene sobre esta región en conflicto armado, se puede asegurar que el riesgo de hambruna es alto y aumenta cada día debido a las hostilidades y a la restricción en el acceso de la ayuda humanitaria. “Nuestros equipos (en Gaza) nos indican que todas las personas piden comida y agua” sentenció.
Por lo que pidió en su calidad de director del organismo internacional un inmediato cambio de paradigma, que se deje de lado la amenaza sobre la interrupción de contribuciones para la región, y que se abra cuanto antes el acceso al personal y al suministro humanitario, además de que los rehenes sean liberados.
Aseguró que cada plan que la OMS ha presentado para la distribución de ayuda humanitaria ha sido bloqueado por Israel, “Se trata de una población que está muriendo de hambre, que está siendo empujada al precipicio sin que sean parte de este conflicto, porque recordemos, los civiles de Gaza no participan en esta guerra y deben ser protegidos” sentenció.
De acuerdo a los datos proporcionados por la Organización de las Naciones Unidas (ONU) las muertes rondaría al día de hoy las 27 mil y además de los más de 65 mil heridos de los que tiene confirmación el organismo, tanto como una cifra aún sin cuantificar de desaparecidos, entre los cuales estarían familias completas.
