Empresarios del Estado de México sostuvieron un desayuno de trabajo en Toluca con Luis Fernando Camacho Lupercio, magistrado penal y presidente electo del Tribunal Superior de Justicia del Estado de México para el periodo 2029-2031. El encuentro, organizado por el empresario José Monroy y su padre, tuvo como objetivo construir vínculos institucionales entre el sector privado y el nuevo modelo de justicia estatal. Durante la reunión, Camacho Lupercio explicó los principales cambios derivados de la reciente elección del 1 de junio, considerada un parteaguas en el modelo de selección de juzgadores. Señaló que el nuevo sistema judicial busca acelerar los tiempos de resolución y brindar mayor certeza jurídica, especialmente en casos de despojo, delito que ya fue tipificado como grave en la entidad.
Uno de los temas centrales fue la necesidad de proteger la propiedad privada y promover un poder judicial más cercano a la ciudadanía. Se resaltó la importancia de la reforma judicial que integró campañas de 35 días para jueces y magistrados, permitiendo que los juzgadores se acerquen a la población de forma transparente a escuchar sus necesidades.


Los empresarios también conocieron el esquema de transición dividido en dos etapas: la primera en 2025, ya realizada, y una segunda programada para 2027. Con esto se cambiaria el 100% del poder judicial. El magistrado presidente electo hizo un llamado al sector privado para colaborar en la modernización judicial, con especial énfasis en la innovación tecnológica, la ampliación de personal y la cobertura con sedes en los 125 municipios del estado.
Finalmente, se reiteró que el objetivo es construir un Tribunal Superior más eficiente, que permita brindar justicia en tiempos razonables y con herramientas modernas. “Justicia tardía es injusticia”, expresó uno de los asistentes, subrayando el compromiso colectivo para fortalecer al poder judicial en la entidad.