La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) ha iniciado un proceso legal tras el hallazgo de 36 ejemplares de animales exóticos en un predio ubicado en el municipio de Ocoyoacac, en el Estado de México. Esta acción forma parte de una investigación conjunta con la Fiscalía General de Justicia, que ha revelado una serie de irregularidades en la posesión y manejo de estos animales, los cuales carecen de la documentación que acredite su legal.
El hallazgo se efectuó en un domicilio de San Pedro Cholula, donde los inspectores de Profepa, en apoyo a las autoridades judiciales, se encargaron de realizar una inspección y emitir un dictamen pericial. Durante la revisión, se identificaron diversas especies de fauna exótica que se encontraban bajo condiciones adecuadas de salud y alimentación, pero sin los permisos requeridos para su tenencia. Entre los animales encontrados se incluyen 17 leones africanos, dos babuinos, un coyote, dos jaguares, un lobo gris, cuatro mapaches, dos martuchas y seis tigres de bengala.
A pesar de que el propietario del predio argumentó que el lugar tenía la autorización para funcionar como santuario y refugio animal, no presentó los registros necesarios para comprobar que el predio estaba debidamente registrado como “Predio o Instalación que Maneja Vida Silvestre” (PIMVS). Tampoco presentó el documento que avalara el programa de manejo correspondiente.
La falta de documentación se convierte en un factor determinante para que la Profepa haya tomado la decisión de interponer una denuncia penal. Además de los 36 ejemplares vivos, en el lugar también se encontraron ocho animales en taxidermia: dos jaguares, dos leones africanos, tres tigres de bengala y un bisonte americano.
El acopio de fauna silvestre sin los permisos adecuados representa una violación a las normativas que protegen la biodiversidad y los ecosistemas del país. Varias de las especies decomisadas están catalogadas en categorías de protección especial, entre ellas el babuino, el león africano, el lobo gris y el tigre de bengala, lo que convierte a este caso en una transgresión particularmente grave. Estas especies requieren de un manejo especial, tanto en cuanto a su conservación como a la regulación de su comercio, y son objeto de regulaciones internacionales.
Cabe recordar que tras el operativo realizado el pasado jueves 21 de noviembre, se reportaron más de 40 personas entre ellos tres menores de edad, todos al interior del predio.