El exfutbolista italiano Francesco Totti, ícono del deporte en su país, está bajo la lupa de las autoridades por presuntas irregularidades fiscales y una denuncia personal en su contra. Estas situaciones han generado gran atención mediática debido a la relevancia del exjugador tanto en el ámbito deportivo como social.
Según el diario La Verità, Totti habría omitido declarar ingresos durante cinco años, acumulando una deuda que, tras intereses y sanciones, ascendió a 200,000 euros. Aunque el exfutbolista realizó un pago significativo en las últimas horas, el caso no se ha cerrado. Las autoridades lo han citado para esclarecer los hechos en una audiencia que podría celebrarse entre el 9 y el 13 de diciembre.
A pesar de la tranquilidad que este pago podría representar para Totti, el panorama se complica con una denuncia presentada por su exesposa, Ilary Blasi. Blasi lo acusa de abandono de menores, señalando que dejó a su hija Isabel sola en casa para salir a cenar. Esta nueva acusación agrega más tensión a una situación ya delicada para el exdeportista.
Totti, quien se ha mantenido activo en diversos negocios tras su retiro del fútbol, enfrenta ahora el desafío de defender su reputación en dos frentes. Mientras avanza el proceso fiscal, las acusaciones personales podrían tener repercusiones legales y emocionales para su entorno familiar.
El caso de Francesco Totti sigue en desarrollo, con la expectativa de nuevas revelaciones en los próximos días. Este escenario pone en evidencia los retos que enfrentan figuras públicas al gestionar su vida personal y profesional tras la fama.